Este año me pienso portar muy bien ( de verdad) y practicar mucho más entre clase y clase de caligrafía (mucho, mucho) .Se que suena a propósito de año nuevo, lo que viene a ser que no me habéis creído, ni un poquito. Pues tengo muchas pruebas , que lo sepais ( bueno, alguna pequeña).
El kakizome es la primera caligrafía del año en Japón. La tradición consiste en coger los pinceles el dos de enero y ponerte a ello. Se escriben haikus con buenos augurios y mensajes de longevidad, pero también pueden elegirse kanjis con un carácter positivo sin necesidad de formar un poema.
Además del componente motivacional o de atracción de las buenas energías , se considera una oportunidad para comenzar el año con una meditación o una retrospección interior.
si aun estas en el colegio, suele formar parte de tus deberes para las vacaciones de invierno.
Yo ya tenía planeado que kanji quería en mi kakizome. Lo había estado practicando en clases anteriores de Shodo Creativo: 道 camino ( Ya os hable de su significado en la entrada de la arquera)
No conseguí sentarme con la tinta hasta el día 6, pero como no soy japonesa creo que se me perdonan estas pequeños detalles. Era importante tener una tarde libre para poder dedicarle tiempo y atención, además, en caligrafía estoy a nivel de cole ( o puede que menos 🙂 ) y esto entraba aun en mis vaciones.
Después de una montañita de papeles desechados y olor a tinta por toda la habitación, decidí divertirme. Y nada es mejor que jugar con la tinta.
Aquí esta el final. Teniendo en cuenta mi nivel , estoy muy contenta con este trabajo. Tan contenta como para querer hacer algo más con él. Un segundo plan.
Ya he empezado un proyecto regular que esta uniendo fotografía y origami: 1000 grullas y 730 fotos .
Ahora que sello cada foto que imprimo, hacía falta un encuentro fotografía – shodo. Aquí está el experimento: Camino
Origami Clover 
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